Mis pecados

sábado, 14 de febrero de 2015

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Déjame mostrarte todos mis pecados, cada uno de los que he cometido, déjame llevarte a mi lado mas oscuro, déjame verte en tu modo menos puro. Solamente quiero conocerte a fondo, enamorarme de tus errores, de tus cicatrices de todo lo que te ha hecho lo que eres hoy... Déjame enamorarme de tu mirada triste, de tu mirada alegre, de tu mirada perdida, esa que se va a volar al cielo y juguetea con las nubes, déjame ir a volar contigo... Llevame hasta lo desconocido. Estoy ciego sin ti, hazme ver el mundo a través de tus cicatrices, como si fueran montañas, cordilleras inexploradas, que tu vida sea mi nuevo comienzo, que tu vida sea mi inspiración para seguir. Márcame con tus besos, quema mi piel con tu deseo, lo único que quiero es que tengas amor, todo mi amor, desgástame, mátame y vuelve a revivirme, cada día vive como si mañana fueras a morir, así vivo yo por ti, te entrego todo lo que puedo hasta caer dormido a tu lado, amarrado a ti porque también tengo miedo de mirar mi realidad sin ti. Así como si no tuviera nada y lo que más me aferra a este mundo es tu presencia, llevame hasta el lugar mas oscuro que conozcas, llevame lejos de las miradas de otros, llevame hasta la profundidad de tu alma, déjame entrar... Déjame entrar...

Pierde un poco lo que encuentras para que aprendas a valorarlo, pero no lo pierdas demasiado que no sabría como volver, no conozco los caminos que puedan volver a traerme a ti y así me he perdido muchas veces, he vivido tanto tiempo en una niebla densa que no me permite llegar a ti, siento que no puedo perder el tiempo, debo estar junto a ti, aparecer junto a ti por arte de magia, pero tengo miedo, así como tu sientes miedo, hoy no siento mis píes, los tengo fríos, como inertes, no puedo ir a ningún lugar, no quiero ir a ningún lugar, pero tengo miedo, mucho miedo.
La vida es como un gota ardiente que sale por tus ojos, una lágrima que quema tus mejillas al cruzar hasta lo bajo de tu cuello, allí donde pasa tu vida, allí donde llega tu sentimiento, hasta tu pecho, siente tu alma y sabes que se te quema la vida. Pierdes el sentido, explotan tus pensamientos, te desesperas, quieres buscar una salida, sentarte en una banca, dejar de pensar, sentir el pasto, volar libre hasta aquellas nubes donde imaginas.

A veces hay cosas que dan miedo, pero es en ese momento cuando somos más valientes, porque estamos enfrentando algo a lo que tememos y si lo vencemos, sabremos lo fuertes que somos mentalmente.
A veces tenemos miedo de abrirnos a los demás, yo tengo miedo de eso, pero quiero, por ti, ser un libro abierto quiero que veas quién soy realmente y por eso quiero que veas mis pecados.